Este apartamento de 68 m2 se encuentra en un edificio construido en 1920 en la ciudad de Gotemburgo (Suecia).
La decoración, con un estilo claramente nórdico o escandinavo, recurre una vez más al infalible binomio blanco y negro, combinado con piezas de madera que aportan la calidez necesaria. Cabe destacar, así mismo, el protagonismo del diseño gráfico, especialmente de las tipografías, en la cuidada decoración de las paredes de esta vivienda.
Un claro ejemplo de que, con un buen proyecto de interiorismo, la falta de espacio no tiene porqué se un inconveniente para conseguir una vivienda acogedora y actual.
La decoración, con un estilo claramente nórdico o escandinavo, recurre una vez más al infalible binomio blanco y negro, combinado con piezas de madera que aportan la calidez necesaria. Cabe destacar, así mismo, el protagonismo del diseño gráfico, especialmente de las tipografías, en la cuidada decoración de las paredes de esta vivienda.
Un claro ejemplo de que, con un buen proyecto de interiorismo, la falta de espacio no tiene porqué se un inconveniente para conseguir una vivienda acogedora y actual.
Síguenos en / Follow us on
El apartamento es pequeñito, pero no lo parece en absoluto, me encantaría vivir ahí!!!!!
ResponderEliminarA mi tampoco me importaría... ;-)
EliminarLo de pequeñito es un decir, si son 68 útiles no me lo parece a mí. ¡La cocina es gigante para un apartamento!
ResponderEliminarLa verdad es que la mayoría de los pisos que hemos visto en los países escandinavos siguen esquemas similares y, en líneas generales, la cocina suele tener bastante entidad teniendo en cuenta el tamaño de los apartamentos (aunque este no sea de los más pequeños). Todo lo contrario de lo que ocurre con los cuartos de baño (o debería decir aseos), por lo general reducidos a la mínima expresión.
Eliminar